En Argentina, cada año 3000 niñas y adolescentes quedan en embarazo. 8 de cada 10 de esos embarazos son no deseados. Aproximadamente 3030 mujeres mueren al año debido a la clandestinidad de un aborto. En 2013, 49 mil mujeres ingresaron a hospitales públicos debido a complicaciones con un aborto. Desde hace varios años, colectivos feministas argentinos han liderado una lucha para la legalización completa de la interrupción voluntaria del embarazo. Actualmente, el aborto solo es legal en caso de que el embarazo sea producto de una violación o si la vida de la madre está en peligro. Hace dos años, activistas argentinas organizaron un movimiento con el que lograron convencer a la Cámara Baja del Congreso de que votara en pro de la legalización del aborto, pero posteriormente el senado rechazó el proyecto de ley. Este año, surge una nueva esperanza de que se apruebe el proyecto de ley para la legalización del aborto, ya que se tiene el respaldo del presidente de la nación, Alberto Fernández.
Muchas argentinas radicadas alrededor de todo el mundo, apoyan y luchan también para que la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo sea legal en su país natal. Hablamos con mujeres argentinas radicadas en Noruega y en Argentina para conocer su opinión acerca de este tema.
Milena Welchli Stettler, quién vivio en Noruega y ha retornado a la Ciudad Autónoma de Bueno Aires, nos dijo:
“Como futura profesional de la salud, considero fundamental la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo como forma de garantizar la vida, la salud y la dignidad de las personas gestantes que elijan, por la razón que fuera, no continuar con un embarazo no deseado. No es un problema moral, ya que cada uno puede actuar según sus propias creencias, sino de salud pública. Hoy en Argentina el aborto es un hecho, ocurre, pero la clandestinidad provoca muertes y daños a veces irreparables a la salud de quienes deciden interrumpir un embarazo. El lema del reclamo es desde hace años: «educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal, seguro y gratuito para no morir». El Estado argentino debería, por ley, garantizar el acceso de niñas, niños y adolescentes a la Educación Sexual Integral, lo cual está aún muy lejos de cumplirse. Además, debe garantizar la entrega gratuita de anticonceptivos en todos los centros de salud del país, públicos o privados. De ser así, es probable que podamos disminuir las tasas de mortalidad materna, como ya ha ocurrido en otros países que legalizaron el aborto, como es el caso de Uruguay. Este año, por primera vez en nuestra historia, un presidente de la nación llevó el reclamo al Congreso y presentó un proyecto de ley propio, eso es un gran avance“.
Paula Nadal de la ciudad de Buenos Aires, nos contó cuál es la gran diferencia entre un aborto legal en Noruega y uno clandestino en Argentina:
“Mi postura en cuanto a la legalización del aborto en Argentina se debe a presenciar el proceso para gestionar un aborto en ambos países. En Noruega se pasa por un asistente el cual te contiene e informa sobre el procedimiento, además de hacerte consciente de que por más que sea legal el proceso es irreversible y debes pensártelo dos veces. La atención es en un hospital donde no te tratan de forma irrespetuosa, toda la atención es muy humana y jamás en todo el proceso te sientes ni sola ni marginada. Que luego de todo el proceso la o él ginecólogo planifique contigo la anticoncepción es algo que destaco ya que da un cierre pertinente al proceso.
En contraposición a este proceso en Argentina es muy difícil. Conseguir médicos reales que realicen este procedimiento, es casi imposible y de conseguirlo la atención suele realizarse en clínicas clandestinas, sin inspección alguna de salubridad y sin garantías de no tener efectos secundarios a futuro a un costo altísimo. En el peor de los casos una mujer determinada a terminar su embarazo pero sin dinero, recurre a prácticas como la toma de misoprostol sin control alguno (este medicamento no lo venden en la farmacia y se debe conseguir por izquierda y sin tener constancia de su eficacia y veracidad). En todas estas situaciones el morir desangrada es el común. Arriesgarse a morir es moneda corriente entre las clases más bajas. Y las que sobrevivan se arriesgan también a ser encarceladas.
Como madre soltera doy fe que conseguir un trabajo teniendo un niño chico es una tarea muy difícil, el costo de vida es muy alto, el sueldo nunca va a la par de la inflación y no hay maternidades que cubran los horarios básicos de un empleo de oficina (9 a 18) que no sean privados (partiendo de 15.000 pesos argentinos siendo que el sueldo básico es de 30.000 aprox.). El hombre en este caso está exento de brindar explicaciones ni de rendir cuentas al estado ni a las fuerzas policiales por abandono o complicidad. Existen muchas maneras de prevenir un embarazo, pero ante la desinformación y la falta de educación sexual en los tiempos que corren, la legalización en principio sería un punto de partida para una sociedad más justa”.
Cyra Druetta es originaria de la ciudad de Santa Fe y esta radicada en Oslo. Ella nos dice que Argentina necesita que el aborto sea ley. Y agrega: “Poder decidir qué quiere una para su vida es un derecho muy básico que está siendo negado, se criminaliza a mujeres que eligen el aborto, y no solo eso, están expuestas a la muerte, a infecciones o enfermedades irreversibles por el resto de su vida al tener que acudir a la ilegalidad sin opción. No es un tema moral, no se puede saber porque una mujer llega a considerar un aborto, pero es importante entender que no es nuestra vida ni nuestra situación y no deberíamos decirle a otro que hacer y que no con su vida privada. Tenemos un problema grande de aceptación como sociedad y juzgamos con mucha facilidad.De conseguir que el aborto sea legal, no nos tenemos que olvidar que igualmente tenemos mucho trabajo por delante, para la sociedad argentina el aborto sigue siendo motivo de vergüenza, las mujeres que abortan son etiquetadas como «asesinas», «desalmadas», «irresponsables» y eligen el aborto porque es «lo más fácil» y son maltratadas.También se necesitan profesionales capacitados para acompañar en el proceso, desde lo médico y psicológico, y que sean capaces de ofrecer su profesión y dejar de lado su opinión personal y sean objetivos.Sin dudas sería positivo para las mujeres argentinas, pero el aborto no solo debe ser ley, sino que debe pasar a ser un tema que no implique vergüenza, discriminacion ni maltrato ” .
Por último, Cintia Noelia Schütrumpf proveniente de Mar de Plata reconoce que es una decisión importante pero que si el aborto llegara a legalizarse en Argentina, implicaría un avance significativo para su país:
«El aborto es una decisión importante en el cuerpo y mente de una niña/mujer. Ha pasado en mi cuerpo, y en personas muy cercanas. El aborto existe. Creo que Argentina va madurar mucho como país con esta nueva ley. Es hora, de dejar el aborto atrás como algo negativo. El aborto tiene que ser un tema del que no tengamos vergüenza, que podamos hablarlo sin sentirnos rechazadas. Pero al contrario, tenés que sentirte contenida, siempre. El aborto nos dará la libertad, para poder expresar que no! cuando se necesite, de forma segura. Hay que dejar de opinar del aborto como si fuera un partido de football. Hay que apoyar a la mujer/niña con amor. Hay que respetar la decisión con compasión.
Tengo un aborto con mi cuerpo, hoy en dia soy madre de dos. Gracias a la ley del aborto legal en Noruega, pude ser madre cuando mi mente y mi cuerpo estaban preparados. ¡Que sea ley!»
Referencias:
PAGINA12. (2018). Datos y estadísticas. [online] Available at: https://www.pagina12.com.ar/112827-datos-y-estadisticas [Accessed 5 Mar. 2020].
Nytimes.com. (2020). El nuevo intento de legalizar el aborto en Argentina tiene el respaldo presidencial. [online] Available at: https://www.nytimes.com/es/2020/02/24/espanol/argentina-aborto.html [Accessed 5 Mar. 2020].